Presentación filosófica, histórica, social y espiritual de lo que significa el tao. Las finalidades de la comunidad taoísta andina.

El TAO, como referencia histórica, se lo conoce como uno de los pensamientos filosóficos más notables de la Cultura China, en general, de la Cultura Oriental. TAO significa ‘EL SENDERO”, como igual se le da el significado del Objetivo Último de todo lo existente, y así mismo, como su Origen.

Lo que en estos días se esta rescatando, no es solo un elevado pensar de una Cultura distante de nuestra realidad andina, sino mas bien, se está desentrañando un legado cultural-espiritual que yacía ignorado, en nuestros propios orígenes culturales, de nuestro continente (cuyo nombre sagrado es ETASHTITLAN), que luego de una conquista sangrienta e impositiva se sepulto premeditadamente nuestros verdaderos valores culturales y espirituales. Cambiando radicalmente los significados de la misma existencia humana. Borrando la memoria ancestral y convirtiéndolo en una realidad actual, desvinculada del pasado. Este continente, o la Gran Pacha Mama, ahora llamado América levanto una nueva forma de vivir, de pensar y de actuar que difiere mucho de lo que era en su pasado andino y continental. Los resultados de la colonización están a la vista, mas sus raíces fueron cortadas, aparentemente. Si, en apariencia, porque… ¿cómo borrar nuestra genética inca? ¿De la maya, de la azteca, de la tairona, de tiahuanaco, de los oanes, chipchas, y aun mas anterior, de lo que hoy llaman los historiadores-arqueólogos, la valdivia, la manta, la tolita, la nazca?; ¿Y las del norte, en una sobrevivencia denigrante, de los llamados “pieles rojas”, etc.? Los extraños no la pudieron borrar y hoy gracias al Gran Pachacute Pachacama, energía cósmica, vuelve a emerger esa genética ancestral.

En aquella realidad anterior, los seres humanos tenían un sistema de valores diferentes; para los contemporáneos quizás extraños, o lo peor aún, incomprendidos e ignorados. Empero nadie hoy se atreve a desmentir, que ellos estaban ligados a las leyes de la Naturaleza, vivían en armonía con los ciclos estelares, conocían del valor de la Madre Naturaleza y la amaban entrañablemente. Muchos pueblos occidentales, los europeos, luego de experimentar el flagelo de sus errores; de mirar a sus culturas como estancadas, en un callejón sin salida; observando el deterioro de sus nuevas generaciones, automatizadas por la super-tecnologia, ponen ahora sus ojos en la que ellos llaman la AMERINDIA, porque algo intuyen quizás, que allí aun se guarda el Gran tesoro que no se pudieron llevar: LA RIQUEZA ESPIRITUAL. Es pues importante que nos adelantemos a rescatar, proteger y desarrollar esta riqueza que viene a ser la fuente de la misma riqueza material, intelectiva y espiritual.

En tal redescubrimiento encontramos que los Mayas, los Aztecas, los Incas, los Tiahuanaco, etc. También manejaron las leyes Solares-Lunares. Conocieron de las cuatro puertas de la Naturaleza. La fertilidad del gran Sol en la Pacha Mama. De que todas las criaturas tienen el mismo origen y por lo tanto el mismo derecho a la vida y a su desarrollo natural. Ellos en su lenguaje propio practicaban el TAO, que en los libros de sabiduría china, como el “I Ching” o libro de las mutaciones, se refiere al Padre Sol como la fuerza Yang, y la fuerza Lunar, como “Yin”. Los códices Mayas y sus libros sagrados, como el Popol Vuh, el Chilam Balam, el Rabinal Achi, Nos hablan del TAO, el Gran Dios Invisible, “el Desconocido” vibrando en vocablo humano como: HUNAB KU y su diagrama, sello o mándala sagrado es el mismo Yin-Yang del Oriente. Qué decir del pueblo Inca, los 4 suyos, la división territorial urbana, del sector alto (solar) del sector bajo (lunar). No es mera coincidencia, que al gran territorio en el cual se enseñaban las sagradas enseñanzas del gran INTI, y del Dios Desconocido, invisible: Hatum Pachacute, Pachacama, Taita Inti Viracocha, a ese espacio le llamaron el TAHU-ANTI-SUYO.

De allí que hoy, las comunidades Taoístas Andinas, no solo reconocen a una de las tantas expresiones históricas, como del taoísmo en la China, sino también en nuestras propias culturas. Porque el taoísmo no es un legado intelectual únicamente de un sector humano, es una filosofía de vida, un estilo de vida y un estado de conciencia a la que todos pueden alcanzar.

EL TAO ANDINO o INTI TAU EN ESTOS DIAS

Propone una verdadera revolución total, integral, ya que comprende que el principal gestor, el único gestor de un verdadero cambio es el Hombre. Sin cambiar al hombre y su estado de conciencia, los cambios políticos, económicos, de sistemas, solo son parciales e inestables.
Estos son los pilares que se afirman sobre la base de la REGENERACION del Taoísmo(o revolución genética):
1. La SALUD, que en el taoísmo es la vuelta a la armonía, de uso y convivencia con las Leyes de la Naturaleza. Allí el practicante encuentra los elementos de su salud, que son, en un buen porcentaje, lo que se deduce de la Sabia Nutrición. El otro porcentaje complementario es la activación del cuerpo. El movimiento de la Energía en uso adecuado de los cuatro elementos de la naturaleza, cuales son, el aire, el agua, la tierra y el fuego. Lo que en su combinación alquímica se llega al 5to. Elemento y que es el principio de los otros cuatro: el Éter o el Fuego Superior espiritual. En nuestra propia experiencia, hemos comprobado que un practicante taoísta no es esclavo, no necesita de las vacunas que es un artificio malévolo del Sistema Imperialista Mundial. No necesitamos de los alimentos industrializados, en los cuales se esconden los químicos que acortan la vida y producen las enfermedades del siglo. No necesitamos de las medicinas químicas creadas por las superindustrias. Por ende no requerimos de una compleja y millonaria estructura de la salud, para vivir saludables.

Nosotros vivimos en la prevención consiente y continua de evitar las enfermedades de contagio y sobre todo hemos creado en nuestros cuerpos un sistema inmunológico diferente de la media y aun de lo mejor que pueda encontrarse en la gente común que es esclavo o cliente de las grandes y fraudulentas Macro-empresas de las industrias de las medicinas y los alimentos, que tienen los mismos capitales accionistas (sionistas).

2. LAS ARTES MARCIALES. Siendo el complemento de una sabia nutrición y viceversa, es además el mecanismo para desarrollar la energía trasformada y transformadora. Los defectos humanos requieren de una transformación o de una mutación. Los errores están guardados en los códigos genéticos al igual que las virtudes. Es conveniente cambiar los datos con errores y desarrollar las virtudes. Esto es aquella revolución genética de la que hablamos. Esto es posible, alterar los datos equivocados y convertirlos en datos positivos. Los ejemplos están a la vista: La disciplina y la actividad ordenada es lo opuesto a la vagancia o pereza. La Honradez, una de las principales virtudes de un taoísta, es opuesto al deseo del robo. La honorabilidad es consecuencia del dominio de sí mismo y la sumisión de la personalidad egoica. Etc. El practicante de las Artes Marciales desarrolla todas esas virtudes y por ende miniminiza o transforma los defectos.

3. EL SOCIALISMO PRÁCTICO. Es obligación del practicante del Taoísmo Andino ser útil a la sociedad e interactuar en ella en términos de un verdadero socialismo. Solidario, con todos los que lo rodean, enseñando lo que a él le ayuda a ser mejor “ente social”. Cultivándose a sí mismo y enseñando a los demás a no perjudicar a su hermano prójimo. Conllevando su esfuerzo a una meta común, cual es de lograr una sociedad justa, equilibrada. Altamente productiva y libre de las cadenas que nos atan a ese pasado nefasto de taras, de prejuicios, de falsas y dogmaticas creencias.

Lo expuesto tiene su síntesis, cual es LA REGENERACION HUMANA, mecanismo para aspirar a una mejor convivencia humana, y todo esto no es más que una transformación genética, que es la transformación de las fuerzas o principios de la vida, que es la energía sexual. Es la integración del hombre humano al Ser interior. Ese es el hombre de fuego. La serpiente emplumada. El hombre tigre, o el hombre águila de nuestros antepasados.

Amauta: INKIHANTI