quimioterapiaEl gas mostaza, también conocido como mostaza de azufre, es cuando mucho el arma química más horripilante jamás usada en la historia. El genocidio impulsado por la élite financiera durante la Segunda Guerra Mundial fue el contexto en el cual se empleó esta arma. Lo más irónico de esta triste lección de la historia es que en la actualidad el “régimen” político y farmacéutico en los Estados Unidos continuó e impulsó el uso de una forma del gas mostaza como “terapia” para el cáncer, eventualmente convirtiéndolo en el método oficial de tratamiento.

Desde hace varias décadas, los Estados Unidos han estado haciendo una fortuna de la miseria que la quimioterapia deja a las víctimas de un sistema médico plagado mejor conocido como “gestión de la atención médica crónica”.

El gas mostaza Bis-(2-cloroetil) sulfuro, fue sintetizado por primera vez en 1860 por Frederick Guthrie, co-fundador del London Institute of Physics. Guthrie fue quien documentó primero los tóxicos efectos del gas mostaza al aplicar esta mezcla de etileno y dicloruro de azufre a su propia piel. Más adelante fue producido en masa bajo el nombre de “Lost” por Bayer (una empresa alemana con financiamiento estadunidense) y varias mutaciones del compuesto han sido usadas por las  potencias mundiales para matar a miles de personas.

Después de la Segunda Guerra Mundial, lo que siguió después fue la masacre bien planificada a través de los alimentos tóxicos, seguido por un programa de tratamiento con quimioterapia y radiación directamente correlacionado para la enfermedad inducida químicamente. Este plan maléfico se convirtió en la máquina  perfecta de hacer dinero que engaña a los pacientes del cáncer para que piensen que algo positivo está pasando, nada más para llevarlos a someterse a más torturas costosas financieramente.

Los Científicos alemanas trabajando para  los Estados Unidos sabían que la quimio “mostaza” solo brindaba una remisión temporal del tumor y si la ingestión de toxinas continuaba, el cáncer regresaba con más furia

La mostaza de azufre es un vesicante, lo que indica que  destruye las membranas mucosas. Altas dosis pueden  causar náusea, vómitos y fallos respiratorios. Este veneno volátil previene la secuencia normal de replicación de ADN, agotando el revestimiento del tracto gastrointestinal y causar pérdida masiva de la masa ósea. En términos simples, la mostaza de azufre es básicamente el “huevo” del cual la quimioterapia ha salido.

Durante la Segunda Guerra Mundial, Dwight D. Eisenhower almacenó 100 toneladas de gas mostaza en el S.S. John Harvey cuando estaba estacionado el puerto de Italia, pero los ataques aéreos nazis lo destruyeron. Los sobrevivientes murieron al poco tiempo y las autopsias revelaron que habían sufrido una profunda linfopenia, así como la supresión de las l líneas de células mieloides, lo cual nos conduce a los hechos sombríos relacionados con la quimioterapia.

La quimioterapia mata  los glóbulos blancos, los cuales son necesarios  para el sistema inmunológico para luchar contra las infecciones. Mieloma es un cáncer que comienza en las células plasmáticas, un tipo de glóbulo blanco. Con el tiempo, estas células plasmáticas anormales se acumulan en la médula  ósea, dañando la parte sólida del hueso. La tasa de incidencia del mieloma ha incrementado 25% en los Estados Unidos ¡sólo a partir de 1975! Además, la información sobre el cáncer de hígado muestra una triste realidad sobre el programa oficial de tratamiento donde la tasa de fallecimientos ha incrementado por encima del 280% desde 1975 y más del 60% de los estadunidenses a los que se les ha diagnosticado leucemia han muerto de esto.

Las pruebas clínicas prueban que la mostaza de  nitrógeno ayuda a que los tumores temporalmente retrocedan, pero la medicación no puede continuar de forma perpetua, ya que esta induce a padecer neutropenia (la reducción severa de los glóbulos blancos en la médula ósea que ingieren las bacterias). Por tanto, después de la retirada obligatoria de la medicación, hay una reaparición abrupta de los tumores. Este “milagro” temporal no es nada más que una “supernova” médica y el resultado final son más noticias terribles para el paciente. (http://natamcancer.org/page65.html)

Alimenta al Pueblo con Toxinas, después dales  quimioterapia

Para hacer corta la historia, los políticos y el clan de las grandes empresas farmacéuticas con sus ejecutivos excesivamente bien pagados se sientan y planifican el uso de una guerra química llamada “tratamiento” para el cáncer, sabiendo de antemano que no es una cura  para nada. Este maligno conglomerado conspirativo de villanos médicos usó toda la información invaluable que los científicos alemanes ya habían descubierto y probado con las toxinas farmacéuticas y alimenticias que causan cáncer y sobre esta base diseñaron su imperio al que se someten los  pacientes de cáncer.

Esta es ahora  la  fuerza conductora de la gran epidemia de cáncer en el mundo; el genocidio clandestino y silencioso cotidiano que funciona como una gigantesca empresa rentable.

La mayoría de la gente no tiene ni la más mínima idea de que la quimioterapia tiene un una miserable tasa de éxito de 5% y que es así solamente con unos cuantos tipos de cáncer.

A  pesar del creciente uso de múltiples medicamentos para la quimioterapia, la tasa de sobrevivencia para el cáncer de mama no ha mejorada para nada en los últimos diez años y no existe ninguna prueba documental de mejora alguna desde la primera metástasis. Por encima de todo esto, el tiempo de sobrevivencia ha sido acortado para algunos pacientes a los que se les dio quimioterapia.

Es un hecho comprobado de que muy pocos doctores seguirían su propio tratamiento para sí mismos, para sus familiares o sus amistades con el que tratan a los demás pacientes de cáncer.

¿Por qué? Porque como ya fue comprobado en una encuesta, el 75% de los doctores, los cirujanos y los oncólogos declaró que jamás se someterían a la quimioterapia dada su altísima toxicidad y su evidente inefectividad.

Cuando un quimioterapeuta de Sloan-Kettering descubrió que tenía cáncer avanzado, le dijo a sus colegas: “Hagan lo que quieran, pero menos quimioterapia”. (http://campaignfortruth.com)

Fuentes:

http://natamcancer.org/page65.html

http://www.townsendletter.com/Oct2011/cancer1011.html

http://www.thelancet.com

http://www.getipm.com/personal/cancer-racket.htm

http://www.healingcancernaturally.com

http://campaignfortruth.com