KremlinJunto con sus camaradas judíos, Lazar Kaganovich organizó la destrucción de los sitios de herencia histórica y cultural de Rusia.

Siendo un judío Sionista, Lazar Kaganovich odiaba las iglesias. La cristiandad es considerada una herejía dentro del Judaísmo. Kaganovich empezó haciendo estallar los arquitectónicamente únicos y valiosos monasterios e iglesias en Moscú.

Un estudio más detenido revela que esta ola de demoliciones no fue nada casual, sino que tenía un cierto malvado plan detrás de él. Si se trazan líneas rectas entre las iglesias demolidas en un mapa, la figura resultante es como… la Estrella de David.

(Galina Belaya, “Ahora los judíos son culpados de la tragedia Soviética”, Dagens Nyheter, 2 de enero de 1991) Muchas iglesias pequeñas fueron convertidas en retretes públicos o museos de ateísmo. Eso jamás sucedió con una sinagoga. Kaganovich también aprovechó la oportunidad de destruir varios fuertes medievales. Sólo un chaparrón esporádico de destrucción de iglesias ocurrió durante el tiempo de Lenín. Hubo ciertos diligentes bolcheviques rusos que, en su ignorancia, también dañaron sinagogas. Ellos tuvieron que pagar caro por ello después.

A las dos en la mañana del 5 de diciembre de 1931, Kaganovich hizo estallar la magnífica catedral del Cristo el Salvador. Fue construida en recuerdo de la liberación de Rusia de Napoleón en 1812 y fue terminada en 1883. La catedral estaba ricamente decorada – media tonelada de oro, varias toneladas de plata, amatistas, diamantes, esmeraldas, turquesas, topacios, iconos que no tienen precio,. Las sillas fueron fijadas con las joyas. Tomó 44 años construir la iglesia y se permitió su existencia durante sólo 48 años.

Dos obreros de demolición alemanes se negaron a destruir la iglesia. Fueron ambos ejecutados por su resistencia. El ingeniero ruso Zhevalkin llevó a cabo la demolición. Sólo se tardó unos meses en saquearla, destruirla en trozos y finalmente nivelar la catedral con la tierra.

Kaganovich y Stalin habían ordenado que el arquitecto judío Boris Yofan diseñara el Palacio del Soviet (o el Castillo del Kahal), qué sería construido donde estaba la catedral. Este edificio fue planeado para tener 415 metros alto y habría asombrado al mundo. El edificio del Estado Imperial (Empire State Building) construido en 1931 tenía sólo 381 metros de alto. Una estatua de Lenín de 70 metros lo cubriría en lo alto.

Los planes nunca fueron realizados, sin embargo. El problema con esta idea fue, que el terreno en esta área, justo a corta distancia del Kremlin, era inconveniente para un edificio tan grande y pesado. Nikita Khrushchev en su lugar hizo construir una piscina allí a finales de los años cincuenta. En 1993, los líderes de la iglesia rusa decidieron reconstruir la catedral.

Lazar Kaganovich fue puesto a cargo de la construcción del tren subterráneo de Moscú (el metro). Comenzó un sistema brutal de trabajo de esclavos dónde 70.000 obreros fueron obligados hasta el extremo en tres turnos. Hizo que los Chekistas capturaran a muchachos de 11 años y les hacía trabajar por sus vidas de tal manera que el Metro se terminara el 1º de Mayo de 1935, que correspondía al aniversario número 159 del Illuminati y el Día santo de Yahweh. Kaganovich fue galardonado como “Caballero de la Orden de Lenín” por la organización de este proyecto en que muchos obreros murieron. El pueblo ruso comenzó a llamarlo entretanto, “el Comisario de Hierro”. Los funcionarios judíos lo llamaban “el Gran Lazar.” El tren subterráneo, diseñado por Alexei Shchussev, fue acabado a tiempo.

Los primeros en viajar en el Metro fueron los miembros del Politburó, con la excepción de Stalin que tuvo miedo ir tan profundo bajo tierra. Su enfermedad había tomado un giro para lo peor. El metro recibió el nombre de Kaganovich.

Después de esto, en 1935, Lazar Kaganovich fue nombrado Comisario del Pueblo para las Comunicaciones. Inmediatamente afirmó que había enemigos del pueblo que se camuflaban como obreros del ferrocarril. Ordenó que aquéllos debían ser rastreados y expuesto. En los archivos, hay 32 cartas de Kaganovich al NKVD que contiene demandas para el encarcelamiento de 83 funcionarios importantes dentro del sistema de transporte.

El libro “El Lobo del Kremlin” también relata cómo Lazar forzó a su propio hermano, Mikhail Kaganovich, a cometer suicidio para evitar un juicio aparejado dónde él sería acusado de espiar para los alemanes. Su hermano, tal como lo he mencionado previamente, era el Comisario del Pueblo para los asuntos de la Aviación. Kaganovich después también exterminó a otros hermanos. Declaraba: “¡Yo sólo tengo un hermano – Stalin!” Kaganovich también estuvo detrás del “Plan quinquenal para el ateísmo” que comenzó en 1932. Planeaba cerrar la última iglesia rusa en 1936, de tal manera que el nombre de Dios nunca más se mencionara en la Unión Soviética después de 1937. Sin embargo, el “Plan de cinco años para el ateísmo” nunca fue realizado.

Kaganovich que administró el atroz terror, se aprovechó de todas las debilidades de Stalin, que no eran pocas. La hija de Stalin, Svetlana, afirmó en occidente que pareciera que su padre Stalin, estaba poseído por demonios. Era bajo de estatura, sólo 1 metro 55 centímetro (5 pies 1′) y padecía de un complejo de inferioridad debido a esto.

Al mismo tiempo, él padecía de algún tipo de parálisis en su brazo izquierdo encogido.

Contrajo la viruela cuando era un adolescente y su cara todavía estaba desfigurada por las feas cicatrices de viruelas. Además, era un psicópata alcohólico paranoico. Quizás por ello era tan cobarde que ordenó que encontraran un doble de él en la primavera de 1935.

La policía secreta encontró a un hombre conveniente en Vinnitsa. Se llamaba Yevsei Lubetsky. Artistas del maquillaje arreglaron tan bien su cara que ni el secretario de Stalin podía notar la diferencia entre él y su amo real.

Todos los que habían estado involucrados en el proceso de organizar el doble de Stalin fueron eliminados. Sólo Kaganovich, Molotov y Malenkov sabían que Stalin tenía un doble. El Camarada Lubetsky también vivía en una villa. Los sirvientes en la casa realmente creían que su amo era el verdadero Stalin.

Visitó teatros, se paró ante el mausoleo de Lenín, recibió a delegaciones extranjeras … Lubetsky fue arrestado en 1952 pero se salvó por la muerte de Stalin.

Murió en 1981 en la capital de Tadjikistan, Dushanbe.

Hasta 1929, casi no existía una señal de culto por Stalin en la Unión Soviética.

Visitó varias instituciones sin guardias personales para jugar al demócrata – disponible para todos. Fue Kaganovich y Mekhlis quienes cambiaron eso. Hacia fines de 1929, las primeras pinturas teñidas de rosa de Stalin comenzaron a transformarse. Después de eso, Stalin fue hecho crecer como un genio cada vez más grande.

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