El dibujo es algo defectuoso. En la mano se encuentra bien clara la línea del Sol. Esta, principiando, desde la Línea de la Vida (no confundir con la Línea Hepática), es más gruesa en un principio, para adelgazar llegando a la Línea de la Cabeza, para, una vez que la haya atravesado, ponerse más gruesa en el acto, no es una línea única sino que se compone de varios pedazos que van juntos.
Esto prueba que el médico, cuya mano se describe, tendrá dificultades en todos sus asuntos, pero de los cuales saldrá vencedor.
Al otro lado de la Línea de la Cabeza se ve la Línea {le Apolo partirse en dos brazos. Esto nos hace suponer que el señor éste debe tener dos ocupaciones simultáneas y que sea muy variable en sus labores. Uno, la ciencia; el otro, las cosas prácticas de comercio.
Como hay un cuadrado sobre el monte de Mercurio, el doctor tendrá mucho éxito al dedicarse a los negocios.
Como la Línea del Destino está atravesada, habrá muchos enemigos y competidores que se encargarán de amargarle la vida.
Tanto el doctor Lomer como Issberner-Haldane, acostumbran remitir por escrito los pronósticos solicitados por sus clientes, rogando al mismo tiempo a estos que luego les comuniquen los resultados; y me consta que ambos doctores han logrado pleno éxito en un noventa y tantos por ciento de los casos.
Yo de estos dos autores he aprendido mucho, logrando idéntico éxito.
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